Redacción admin

A medida que pasa el tiempo, se van conociendo más detalles alrededor de la trágica muerte del cantante británico, Liam Payne, quien falleció luego de caer de un tercer piso en un hotel ubicado en el barrio Palermo, en Buenos Aires, Argentina.

 

Recientemente, se conocieron algunos de los hallazgos de los estudios forenses, donde se comprobó que había cocaína en la sangre de Payne.

 

Pero no solo eso, según cuenta el Daily Mail, los análisis mostrarían que el cantante consumió metanfetamina, cocaína, crack, ketamina, éxtasis y cocaína rosa.

 

Sobre esto, se han generado muchas preguntas en torno a los efectos o lo que podría haber experimentado Liam. En este sentido, un exjugador de la NBA, dijo haber consumido en el pasado las mismas drogas.

 

Lamar Odom habló sobre los efectos de las drogas en la mente

 

Se trata de Lamar Odom, quien pasó por equipos como Los Ángeles Lakers y Miami Heat. Odom mencionó: "las drogas pueden provocar alucinaciones y si él estaba en un estado de alucinación, entonces quién sabe qué pasó".

 

El exdeportista recordó que cuando consumió cocaína rosa, alucinó con voces en su cabeza y especula que algo similar le puede haber ocurrido a Payne.

 

"Si escuchas voces, entonces ya sabes, es difícil escapar de esas voces", mencionó.

 

El informe inicial de la autopsia realizada por el Ministerio Público Fiscal de Argentina concluyó que Liam Payne falleció debido a un "politraumatismo" y a una "hemorragia interna y externa" asociada con la caída.

 

Efectos de la cocaína rosa o 2CB, hallada en el cuerpo de Liam Payne

 

La cocaína rosa, también llamada tusi, es una combinación de MDMA (éxtasis), ketamina, anfetaminas, LSD u otros alucinógenos, junto con sustancias de relleno como cafeína, anestésicos o incluso azúcar.

 

Los efectos de la cocaína rosa son similares a los del MDMA, incluyendo euforia, alucinaciones y un aumento de energía.

 

En el organismo, puede causar dilatación de las pupilas, hipertensión, taquicardia, aumento de la temperatura corporal, sudoración y tensión en la mandíbula.

 

El nombre "tusi" proviene de la pronunciación en inglés de 2C-B, una molécula psicoactiva sintetizada por el químico Alexander Shulgin en 1974.

 

 

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