Redacción admin

En un hallazgo sin precedentes para la ciencia finlandesa, investigadores de la Universidad de Jyväskylä lograron aislar por primera vez un virus gigante en ese país. Bautizado como Jyvaskylavirus, este agente duplica en tamaño al virus de la gripe y al coronavirus, aunque no representa una amenaza conocida para los humanos. El descubrimiento se dio tras años de trabajo colaborativo con otros centros de investigación internacionales.

 

Según explicó la profesora Lotta-Riina Sundberg, citada por el portal especializado Phys.org, el estudio permitió identificar y analizar la estructura y genoma del virus, hallando similitudes sorprendentes con los virus de Marsella previamente aislados en Francia. Esto lo ubica dentro de la misma familia, lo que podría facilitar futuras investigaciones sobre su comportamiento.

 

Un virus gigante con estructura compleja y frágil

 

A nivel estructural, el Jyvaskylavirus presenta una cápside que protege una vesícula de membrana con simetría icosaédrica. Esta cápside cuenta con más de 9.200 copias de una proteína estructural principal, y en ella se encontraron señales de proteínas adicionales, lo que sugiere una compleja red de estabilización del virus. Esta estructura, según los investigadores, guarda similitudes con otros virus gigantes como el Melbournevirus y el Tokyovirus.

 

“Descubrimos abultamientos únicos en el eje quíntuple de la vesícula interna, un rasgo que hasta ahora solo se había observado en esos dos virus emparentados”, detalla el estudio publicado en la revista eLife.

 

El hallazgo comenzó con muestras ambientales

 

La investigación arrancó en el verano de 2019, cuando los científicos recogieron muestras ambientales en Finlandia Central para intentar aislar virus gigantes mediante cultivos con amebas locales. A pesar de que observaron partículas con características virales, los primeros intentos enfrentaron dificultades debido a las condiciones del huésped protista nativo.

 

Para avanzar, se recurrió a tres cepas huésped de referencia conocidas: Acanthamoeba castellanii, A. polyphaga y Vermamoeba vermiformis. Con ellas se analizaron un total de 96 muestras recolectadas, lo que eventualmente condujo al aislamiento del nuevo virus.

 

Análisis molecular con criomicroscopía y tecnología de punta

 

Para lograr observar el Jyvaskylavirus a nivel molecular, el equipo científico empleó microscopía electrónica de helio y criomicroscopía electrónica. Estas técnicas permitieron identificar las cinco proteínas que estabilizan la estructura viral, así como las proteínas que recubren y cierran los vértices de la cápside.

 

Una mayor densidad observada sobre los capsómeros pseudohexaméricos sugiere que estas estructuras cumplen una función clave en la estabilidad del virus, una característica compartida con otros virus gigantes estudiados anteriormente.

 

Importancia científica del descubrimiento

 

“El hallazgo aporta pistas valiosas sobre cómo estos virus interactúan con microbios y cuál es su papel en la regulación de las poblaciones vivas”, afirmó la profesora Sundberg. Además, recalcó que este conocimiento podría ayudar a entender mejor la evolución de los virus y su diversidad estructural.

Comparte en:


También puede interesarte
Última Hora...