Redacción
admin
El anuncio de "Habemus papam" es uno de los momentos más esperados por los fieles católicos en todo el mundo. La última vez que se escuchó fue el 13 de marzo de 2013, cuando Jorge Mario Bergoglio fue elegido como el Papa Francisco, tras la renuncia de Benedicto XVI. Desde entonces, no ha vuelto a reunirse el Colegio Cardenalicio en cónclave. Pero, ¿cómo se elige al máximo líder de la Iglesia Católica?
El papel del cónclave en la elección del Papa
Cuando el cargo de Papa queda vacante, ya sea por fallecimiento o renuncia, el Colegio Cardenalicio se reúne en un proceso conocido como cónclave. Esta reunión, cargada de tradición y secreto, se lleva a cabo en la Capilla Sixtina, en el Vaticano. Su objetivo es elegir al nuevo obispo de Roma y líder espiritual de los más de mil millones de católicos en el mundo.
De los 252 cardenales actuales, solo 138 tienen derecho a voto, ya que la normativa establece que solo pueden participar aquellos que tengan menos de 80 años. Los otros 114, aunque siguen siendo parte del colegio, no tienen voto en la elección.
Reglas y rituales de una tradición milenaria
La palabra “cónclave” viene del latín cum clave que significa “con llave”. Esto hace referencia al aislamiento total al que se someten los cardenales votantes durante el proceso. Una vez que ingresan a la Capilla Sixtina, no pueden salir ni comunicarse con el exterior hasta que haya un nuevo Papa.
Este sistema fue formalizado en el siglo XII y ha evolucionado con el tiempo. Según el escritor y experto papal John Thavis, durante el cónclave de 2013, los cardenales fueron extremadamente reservados para evitar parecer que hacían campaña por el cargo.
Fases de la votación papal
El proceso de votación se divide en tres partes: preescrutinio, escrutinio y postescrutinio. En el primero, se distribuyen y preparan las papeletas; en el segundo, se realiza la votación y el conteo; y en el último, se verifican los resultados y se queman las papeletas
.
Si no se alcanza una mayoría de dos tercios, las papeletas se queman con un químico que produce humo negro, señal de que aún no hay Papa. Cuando finalmente se elige al sucesor de San Pedro, se lanza humo blanco, y minutos después se anuncia su nombre al mundo.
Historia y evolución de la elección del Papa
Antes del siglo XI, el pueblo romano y el clero local influían significativamente en la elección papal. Sin embargo, en el año 1059, el Papa Nicolás II cambió las reglas para que solo los cardenales obispos tuvieran la autoridad de elegir al nuevo Papa. Desde entonces, el proceso ha estado cada vez más regulado y aislado de influencias externas.
¿Cuánto tiempo puede durar un cónclave?
El cónclave comienza entre 15 y 20 días después de que se declare la sede vacante. Este lapso permite que todos los cardenales votantes puedan llegar a Roma. Las votaciones se repiten hasta cuatro veces al día. Si tras tres días no hay decisión, se hace una pausa para oración, y si el ciclo se repite siete veces, se pasa a una segunda vuelta con los dos candidatos más votados.
Un evento de gran atención mundial
Durante el cónclave de 2013, más de 68.000 cámaras transmitieron cada detalle del ambiente en la Plaza de San Pedro. La tensión era tal que incluso una gaviota blanca que se posó en la chimenea fue interpretada por muchos como un símbolo de esperanza. Finalmente, el humo blanco anunció la elección del Papa Francisco, el primero latinoamericano en la historia de la Iglesia.
Comparte en: